
UN SIMPLE CAPRICHO del callejero ha puesto de actualidad un cruce caminos en Madrid: el del esquinazo de la calle Amnistía con la de la Independencia, junto a la plaza de Isabel II (más conocida como Ópera). O dicho de otra forma, no hay lugar en España donde la amnistía esté más cerca de la independencia que en Madrid, entiéndase la ironía.
Si a esto le unimos que debajo del cartel de la calle Amnistía –placa ilustrada con grilletes rotos y un pergamino real–, se puede leer ‘Asegurada de Incendios’; y que un metro más abajo, en el centro de la misma esquina, el Ayuntamiento colocó una señal de tráfico alertando de que es una entrada prohibida para la circulación, pues resulta que tenemos todos los elementos para que la foto haya hecho furor en las redes sociales.
Investidura
Así viene ocurriendo tras el resultado electoral del pasado 23 de julio, además de por el (fallido) proceso de investidura de Alberto Núñez Feijóo, cuyo acceso a La Moncloa tendrá que esperar a mejor ocasión, si es que finalmente se produjera.
Muchos paseantes y turistas se paran y hacen fotos en ese cruce de calles, que tan gráficamente representa las exigencias de los nacionalistas catalanes (Junts y Esquerra) para apoyar la investidura de Pedro Sánchez.
Historia
La foto, que a buen seguro, habrá hecho las delicias de los seguidores de Puigdemont, Nogueras, Rufián, Junqueras y Aragonès, por lo que eventualmente pudiera tener de agorera, si bien, la realidad es que estas calles hacen alusión a la Guerra de la Independencia contra los franceses y a la amnistía general de la reina consorte María Cristina de Borbón, tras la muerte de su esposo, Fernando VII, a los liberales exiliados. Nada que ver, en definitiva, con la cuestión catalana.
Se calcula que en Madrid hay más de 9.100 calles, pero el azar ha querido que convivan aquí, junto al Teatro Real, las que dan nombre a dos de los conceptos de mayor controversia política, mediática, jurídica.
¿Premonición a la madrileña, o simple casualidad? El tiempo dirá. De momento, siempre se podrá decir que la amnistía y la independencia están, literalmente, a la vuelta de la esquina.
Mucho más lejos queda la calle de la Concordia que es, posiblemente, la más necesaria en estos tiempos de tribulación. Y la del Acuerdo, claro, tan necesaria para progresar y avanzar.